¡Buenos días!
¿Qué tal estáis? Yo como siempre muy liado, pero de nuevo he conseguido cumplir con el reto del mes. Ayer a las 22:58 acabé el libro que escogí para el reto de febrero. Se trataba de escoger un libro que continuara una saga o serie que ya hubiéramos empezado.
Hay varias sagas que me gustaría seguir leyendo, sea por falta de tiempo o porque algunos escritores tardan años en escribir el siguiente libro, no puedo continuar con todas las que querría.
Hace prácticamente 4 años que me leí
El prisma negro de
Brent Weeks. En ese entonces, que tenía tiempo para uno de mis mayores placeres, no conseguí hacerme con el segundo libro,
La daga de la ceguera. Durante este tiempo, he ido viendo en las librerías este libro y el tercero que finaliza la trilogía, pero estaba liado con otras lecturas que también me llamaban mucho y después la falta de tiempo. Pero estas navidades, me han traído los dos últimos libros de esta trilogía :) .
Resumiendo, hoy os quiero presentar
La daga de la ceguera, el segundo libro de la trilogía de
El portador de luz.
Acabé muy contento con este escritor con la trilogía de
El Angel de la noche, y recuerdo que empecé El prisma negro con muchísimas ganas. Y como ya comenté, tenía cosas muy buenas, pero, para mi gusto, con varias lagunas a la hora de introducirnos en este nuevo mundo y el modo de funcionar. También encontré que a pesar de que había diseñado un mundo, lo había explotado poco.
Pero ahora todo esto ha cambiado.
La daga de la ceguera ha traído lo que esperaba de Weeks y de esta historia. Ahora sí que nos familiarizamos con el término trazar, no sexplica exactamente qué es trazar y como funciona. Ahora sí que ha conseguido que me meta en la historia y me imagine en nuestro mundo, cómo sería trazar y cómo debería hacerlo.
Otro de los puntos es la expansión de escenarios. Ya no estamos encerrados en Garriston y La Cromería, ahora sí que viajamos por las siete satrapías. Ahora sí que nos hundimos de lleno en el mundo que con tanto espero ha creado Brent Weeks para nosotros.
La verdad es que este libro me ha gustado mucho, creo que la historia ha mejorado considerablemente. El escritor ha tejido una magnífica historia, mezclando todo lo que hace buena una historia de fantasía: lucha, magia, política, religiones, humanos, dioses, traiciones, amor y odio. Todo se enlaza de una forma exquisita.
En muchos libros está bastante diferenciado el bueno de el malo. En este caso es diferente, la frase "No hay luz sin sombra" definiría perfectamente a los personajes que más poder tienen en estos momentos. Todos tienen un lado de luz, un lado que argumentado parece ser el camino a seguir, pero también tienen oscuridad, un lado que nos hace desconfiar. Esta línea se va trazando según vamos avanzando en la historia y por suerte, no es fija, hay momentos en los que quien está haciendo el bien y quien el mal está oculto entre mentiras y secretos.
Es verdad que los dos grandes personajes que se miden son el Prisma y el Príncipe de los Colores, pero no te dejes deslumbrar por estas figuras, puesto que, si tú mismo te provocas esa ceguera, te perderás todo aquello que solo muestra la punta del iceberg y que nos dan a entender que hay todo un mundo invisible a nuestros ojos, pero que si prestas atención pensarás que en verdad allí se está jugando la mayor partida de ajedrez.
Este libro te lleva de la desesperación a la alegría, de la felicidad a la tristeza en un abrir y cerrar de ojos. Un torrente de emociones que te hace querer deborar el libro mientras gritas de alegría y te desesperas de frustración. Ha conseguido lo que yo siempre espero de un libro, que me haga posicionarme y que me alegre y sufra con el devenir de mi elección.
Os invito a todos a leer esta trilogía, yo la verdad es que me muero de ganas de empezar con el tercero, lo tengo justo delante en este momento. Lo bueno es que es un best-seller, requisito para el reto de Marzo, así que... :P