30 noviembre 2017

DIARIO DE UNA BOMBA NUCLEAR (12ª PARTE)

“…Poco a poco mis ánimos van mejorando, no me muevo con la misma soltura y tranquilidad, pero ya no tengo miedo de mi propia sombra. Estoy lejos de esa “gente” o mejor dicho bestias, e intento no pensar en ellos mientras sigo recorriendo el mundo.

¿Cuál debe ser ahora mi propósito? Los dolores continúan, me entran ataques de tos en los que me sale sangre. Ya me lo he preguntado varias veces, pero ¿Cuánto me queda? Antes tenía un propósito que era encontrar personas vivas, pero ahora ya no tengo esa ambición. Entonces ¿por qué sigo viviendo? ¿Por qué me levanto cada día y empiezo a andar? No lo sé, decido levantarme porque estarme quieto no me ayuda en nada.

Puedo ir dónde quiera y quizá poder contemplar las maravillas de la naturaleza, si queda algo que el ser humano no haya destruido.¿Podría volver a disfrutar del vaivén de las olas?

Mañana será un nuevo día, ahora tengo otro propósito diferente, ahora sé hacia dónde ir…”

No hay comentarios:

Publicar un comentario

¿Por qué no opinas sobre la entrada?
Los blogs crecen con los comentarios, ayúdame a crecer ;)